CORTARSE SÓLO...nuevos aires en el Rock Argentino

Hay que remontarse en el tiempo para recordar la cantidad de desprendimientos que han experimentado las bandas con mayor convocatoria de nuestro rock en pos de proyectos propios (sean solistas o no) que también vieron su amanecer en este 2009. Los últimos y no menos rimbombantes que afianzaron sus disputas en las primeras planas del rock argentino rompiendo el hermetismo clásico al que nos tenían acostumbrados fueron Carlos "Indio" Solari y Eduardo "Skay" Bellinson, hoy empapados en sendos proyectos solistas. Yendo aún más atrás, Gustavo Cerati, El Bahiano o Ivan Noble pueden ser otros ejemplos aislados y producidos en tiempos y circunstancias diferentes pero que también continuaban esta lógica "matar la gallina de los huevos de oro" en pos del proyecto personal.

Pero el buceo por la historia no nos dará un parámetro similar a lo que ha sucedido durante este año que cierra la primera década del siglo. Tres de las cuatro bandas con mayor convocatoria del país experimentaron desprendimientos en sus filas, aunque con diferentes reacciones hacia afuera. A diferencia de Attaque 77 (Ciro Pertusi dijo "me voy" y la banda siguió adelante), ni la Bersuit, ni Los Piojos se animaron a confirmar los rumores de la separación ante sus seguidores, escudándose detrás de "descansos sin plazos" que ambos grupos habrían estado necesitando. Con el correr del tiempo, las evidencias fueron apareciendo sobre el escenario. El Pelado Cordera, Juan Subirá y De Bueyes dividieron créditos de lo que era Bersuit Vergarabat con sendos discos independientes y prolíficos espectáculos en vivo. "Pity" Fernandez había formado La Franela y los rumores de ruptura en la "primavera piojosa" empezaron a dar fin a la pediculosis que se paró "por tiempo indeterminado", según la propia banda. Todo estaba tranquilo desde aquel comunicado, hasta que finalmenteAndrés Ciro comenzó a armar su regreso a los escenarios (posiblemente será en Córdoba durante este diciembre) sin piojos y aún sin definir si sólo o acompañado.

Otra variable a analizar de cara a un intento de balance son la materialización de otras experiencias, que no repercuten en separaciones, pero que pueden leerse en la misma clave de la apuesta "por fuera" del formato de grupo que contenía a los artistas en el pasado inmediato. Un buen primer disco de Jorge Serrano (quizás uno de los más prolíficos compositores de las últimas décadas del rock vernáculo), otro experimento solista de Juanse o el trabajo pronto a salir de Edu Schmidt (ex-Árbol).

Estos últimos años que vienen marcando una nueva corriente dentro del rock argentino en donde "desde abajo" lo que parece venir pechando es una nueva camada de solistas con un futuro promisorio, queda marcada también por el final de un conjunto de bandas que van dejando atrás sus experiencias exitosas en pos de nuevas apuestas que el tiempo sabrá valorar como positiva o negativa. Al contrario de tiempos no muy lejanos, en donde estábamos enfrente de una serie de regresos efímeros con poca perspectiva a futuro, la cultura rock asiste a un escenario en donde los grandes grupos se separan (o reformulan sus recetas).

No es para dejar de lado la situación que marca la separación de Intoxicados y la vuelta al ruedo de Viejas Locas (fenómeno quepuede ubicarse exactamente en un "punto medio" en estos fenómenos), la vuelta de Charly García a los escenarios y el afiazamiento de nuevas tendencias en formato de grupos (Bicicletas, Nikita Nippone o Banda de Turistas). En fin, un nuevo escenario del entramado del rock argentino que aparece con las mismas características complejas de siempre y promete el mismo dinamismo cultural de siempre buscando enriquecer poco a poco nuestra cultura con base al sonido de época que comienza a sonar y marcar las tonalidades características del nuevo siglo en nuestro país.